Para tener la certeza de que te estás apoyando.
No es que nunca hayas estado, quizás ahora te necesitas de otra forma.
Me miré en el espejo esta mañana luego de haber hecho algunas “obligaciones” de adulto que necesitaba terminar para que mi mente no se drenara al tenerlas en segundo plano. Me estaba desesperando, pero era importante terminarlas, una vez que acabé, lo que vino a mi mente inmediatamente después de ver mi cara fue:
“Gracias por estar aquí conmigo”.
Estar pasando por desbalances hormonales los últimos meses, ha sido duro y creo que solo quien los ha pasado lo puede comprender de lo que hablo. Es aún más duro cuando el recuperarte incluye despedirte de partes de ti que de alguna forma has querido y celebrado. La buena noticia es que al momento de despedirte de esas antiguas partes, abres espacio para las nuevas que te integrarán, ahora elegidas con la nueva consciencia que adquiriste.
Hace unos meses me di cuenta de que tenía un enojo conmigo misma, sentía que no había estado para mí, que no me había estado escuchando y apoyando. Y luego de reconocer que en realidad siempre he estado, me volví a enojar por no haberme dado cuenta de que siempre estuve, jajaja. Me duró poco. Me aclaré con la libreta y salió este mensaje que comparto contigo hoy.
A veces nos sentimos solos porque quizás la forma en la que nos sentimos acompañados y apoyados ha cambiado y no la hemos actualizado.
Quizás antes te apoyabas al hacer del ejercicio diario, porque buscabas que la práctica se hiciera un hábito y ahora el apoyo que requieres es administrar mejor el tiempo de tus entrenamientos para que un nuevo proyecto cobre vida de una vez por todas.
Y eso no significa que no estás, significa que la forma de apoyarte cambió y necesitas actualizarla, es decir, hacerla consciente.
Quizás la forma de apoyarte antes fue la de obsequiarte accesorios cool para hacer tu arte, ahora quizás tu forma de apoyarte es hacer un ajuste a esas compras para mejorar tus finanzas.
Y eso no significa que no apoyas tus sueños, significa que quieres hacerlos desde un lugar de libertad y no de presión.
Quizás la forma en la que apoyabas antes era dedicando tus fines de semana a trabajar extra para ahorrar e invertir en uno de tus sueños. Ahora quizás tu forma de apoyarte es dedicar esos fines de semana a simplemente descansar.
Y eso no significa que no te interesan tus proyectos, significa que entiendes que para que tus proyectos florezcan, tu tienes que estar bien y el descanso te ayudará a darle la energía de calidad que requieren.
Cuando más desesperadamente busques el apoyo de afuera, más intencionalmente muéstrate cómo tú estás apoyándote. La magia empieza cuando tú te haces disponible para ti.
Esto no quiere decir que vamos a vivir negando el apoyo de los demás, sino que vamos a ser los primeros en confiar y estar para nosotros, para nuestros proyectos, sueños, salud.
Te invito a preguntarte,
¿De qué forma estoy apoyándome?
Quizás algunas cosas van a requerir una actualización. Quizás habrán cosas que ahora ya no necesitan tanto de ti, quizás es momento de brindar esa presencia a lo que está naciendo ahora en ti.
Que se vuelva una costumbre mantenernos en constante actualización en cuánto a las necesidades y formas de apoyo que tenemos en el presente. Apoyarnos para crear una vida llena vida.
Pregunta para que puedas actualizar tu software y deje de trabarse 🤪.
¿Qué requiero hacer para apoyar quién estoy siendo hoy?
Podría pasar que no se trate de hacer, sino de dejar de hacer. Escribe lo que te llegue.
Para responder a mi me funciona poner la actividad, la hora en la que la haré y durante cuánto tiempo. Por ejemplo si para comenzar a sentir que me apoyo requiero escribir, yo pondría en mis accionables:
“Escribir después de desayunar (7:00 am) durante 1 hora cada miércoles de julio”.
Mantén esta información presente, visible. Puedes armar una carpeta física para cada mes revisitarla y ver cómo va el asunto. Luego puedes ir ajustando, editando, modificando según vayas transformándote. Y sí, también ponerlo en Notion, las notas de tu cel, o en tus notas de voz puede funcionar. Pregúntate a ti de qué forma te va a funcionar mejor.
Con amor, K.